Fugas en el circuito de refrigerante

Después de realizar trabajos de mantenimiento o reparación en el circuito de refrigerante del motor, se observan algunas fugas y pérdida de refrigerante. A menudo, es extraño que la causa radique en el componente sustituido.
Una de las reclamaciones más habituales tras la sustitución de componentes son las fugas. Por ejemplo, si después de montar un radiador o un termostato nuevo hay una fuga de refrigerante, en la mayoría de los casos se presupone que el origen está en el componente sustituido. La experiencia nos dice que la mayoría de las veces el fallo está en otro sitio.


La principal causa de los fallos
La causa más frecuente de las fugas en el sistema de refrigeración son las juntas antiguas que se han pasado por alto durante el desmontaje y, en consecuencia, no se han sustituido. En muchos conectores rápidos, por ejemplo, dichas juntas se encuentran en el alojamiento de la manguera de conexión y no se pueden ver directamente desde fuera. Si se abren conectores rápidos o de manguera, hay que sustituir todas las juntas antes de volver a realizar el ensamblaje.


Montaje correcto de las juntas

Al sustituir juntas es imprescindible comprobar que todas las superficies de estanquidad estén limpias de corrosión o sedimentos.

Solo se deben instalar las juntas sólidas sin sellantes añadidos previstas por el fabricante. Las juntas no se pueden montar en seco.
El lubricante más adecuado es el propio medio con el que está en
contacto la junta (en este caso, refrigerante limpio).